La historia de Angy es un testimonio de perseverancia, pasión y dedicación. Química egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México (Facultad de Química, C.U.), actualmente cursa una maestría en la Universidad de Columbia Británica (UBC) en Vancouver, Canadá. Pero su vida no solo gira en torno a los logros académicos; también ha cultivado una profunda pasión por el patinaje artístico, tanto en México como en Canadá. Esta es su inspiradora historia de cómo ha logrado combinar sus estudios con su amor por el patinaje, enfrentando y superando numerosos desafíos en el camino.

Angy comenzó su travesía en el mundo del patinaje artístico sobre ruedas en México a los 15 años, donde encontró un refugio que le permitía sentirse viva y conectada. Su pasión y dedicación la impulsaron a superar obstáculos y a mejorar continuamente. El patinaje no solo se convirtió en una actividad física, sino en una forma de terapia y autoexpresión. Descubrió que lo más importante era hacerlo para ella misma, encontrando tanto alegrías como retos que la empujaban a alcanzar nuevas metas y a ser paciente consigo misma.

Durante la pandemia, Angy aprovechó la oportunidad para expandir sus conocimientos y mejorar sus habilidades, tomando clases en línea con la renombrada Paola Fraschini. Se enfocó en desarrollar coreografías que transmitieran emociones, y trabajó en su entrenamiento mental, guiada por la misma Paola. Este período fue clave para fortalecer su conexión con el patinaje y refinar sus técnicas.

En 2022, decidió continuar sus estudios en Canadá, motivada por su interés en las energías renovables. Vancouver, con su fuerte enfoque en el desarrollo de celdas de combustible, ofrecía el entorno perfecto para sus estudios de posgrado. Sin embargo, la transición no fue sencilla. Angy tuvo que dejar atrás a su familia y a su comunidad roller de Club Cisnes, quienes siguen siendo una parte importante de su vida, a los que visita siempre que regresa a México. Además, enfrentó la falta de pistas públicas de patinaje en Canadá, un obstáculo que la obligó a adaptarse y a encontrar nuevas formas de seguir patinando. Su espíritu emprendedor la llevó a dar clases de patinaje, compartiendo su conocimiento y pasión con otros, lo que le permitió seguir practicando el deporte que ama y abrirse camino en nuevos entornos.

Uno de sus alumnos, Marley, un artista de circo interesado en combinar actos circenses con el patinaje en pareja, le presentó una oportunidad inesperada. Gracias a las bases adquiridas en su primera escuela de patinaje, Ballet sobre ruedas, Angy contaba con los conocimientos básicos para ser portador y voladora en este tipo de espectáculos. Con mucho esfuerzo, práctica y dedicación, Marley y Angy crearon un dúo maravilloso, ofreciendo su primer show juntos ante cientos de personas en el Canada Day de 2023. Este nuevo capítulo en su vida le brindó una manera innovadora de combinar sus pasiones.

Ahora, con la finalización de su maestría en agosto y la expectativa de continuar hacia un doctorado, Angy enfrenta una emocionante y desafiante oportunidad. Su objetivo es contribuir a la lucha contra el cambio climático y promover las energías renovables, mientras sigue alimentando su pasión por el patinaje, ofreciendo clases de patinaje artístico sobre ruedas y participando en espectáculos circenses junto a Marley. A medida que avanza en su carrera y en sus proyectos, el patinaje seguirá siendo un pilar que le brinda fuerza y motivación para seguir superándose.

Angy encontró en el patinaje un espacio para reencontrarse con ella misma, una forma de vida que la conecta profundamente con su esencia y con el mundo que la rodea. Su historia es un poderoso recordatorio de que, con pasión y determinación, no hay metas inalcanzables, sin importar los obstáculos en el camino.

Para Angy, patinar es un refugio, una forma de sentirse viva y perteneciente de algo mágico.

Ella como tú, tienen una historia para contarnos, para inspirarnos, para motivarnos.